Templos

Templo de Karnak

Reservado únicamente a los sacerdotes, el recinto del Templo llegó a alcanzar una superficie de 123 hectáreas y estaba protegido por un muro de adobe con nueve puertas, dos de ellas monumentales pilonos que marcan los ejes principales del conjunto este-oeste y norte-sur. El conjunto del Templo consistía en realidad en tres recintos diferentes dedicados a : el principal al dios AMÓN, el segundo a su esposa NUT y el tercero a su hijo KHONSU; estaban unidos entre sí mediante avenidas -o dromos- flanqueados por esfinges con cabeza de carnero.

                   Tras más de 2.000 años de construcciones ( desde el Imperio Medio al Tolemaico ) llegaron a trabajar en el Templo más de 20.000 personas , y más de siete faraones pusieron su granito de arena en su construcción

                    Al sur del conjunto se encuentra el lago sagrado de los sacerdotes de AMÓN llamados UAB (o puros) de 120 m. de largo  Uno de los recintos más espectaculares del Templo es sin duda la famosa Sala Hipóstila; edificada durante los reinados de SETI I  y de su hijo RAMSÉS II. Situada entre el segundo y tercer pilono, este recinto ocupa una superficie de 104 m. de largo por 52 de ancho; con 134 columnas: las doce columnas centrales tienen una altura de 23 metros y las laterales unos quince.

                    El primer pilono (inacabado) estaba unido al Templo de LUXOR por una avenida procesional flanqueada de esfinges con cabeza humana de 2´5 Km. por la que llevaban al dios AMÓN en la fiesta anual de OPET.

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TEMPLOS DE ABU SIMBEL

  A 320 Km. de ASSUAN en territorio nubio está situado el gran Templo de RAMSÉS II; un gigantesco speos dedicado al dios RA-HARAHTI y a sí mismo. Tiene una fachada de 38 metros de ancho por 33 de alto, con cuatro colosos sedentes de RAMSÉS II de 21 metros de altura.  En el interior se encuentra una sala hipóstila flanqueada por ocho grandes columnas con la imagen osiríaca de RAMSÉS; en una de las paredes se pueden ver escenas de la batalla de QADESH y en la opuesta a RAMSÉS en su carro de guerra.

Al fondo se encuentra el Santuario con cuatro estatuas sedentes de los dioses RA-HARAHTI, AMÓN-RA, PTAH y RAMSÉS II divinizado. Los días 20 de octubre y de febrero la luz del sol penetra hasta el Santuario iluminando a tres de las figuras, excepto la de PTAH, que permanece siempre en la oscuridad.

  A unos pocos metros de éste se encuentra el Templo de su esposa NEFERTARI (que quiere decir “la más bella) dedicado a ésta y a la diosa HATOR, con cuatro estatuas de RAMSÉS II y dos de NEFERTARI de diez metros de altura esculpidas en la fachada.

El lugar elegido por Ramsés II para erigir su templo no fue casual. Se encuentra a 280 Km. más allá de la frontera meridional de Egipto en Elefantina, en un punto a la orilla izquierda del Nilo donde se alzaban dos colinas en cuyo interior había dos grutas dedicadas a las divinidades locales; El faraón decidió agrandarlas y construir allí los templos.

En el 1.265 a.C. se inauguran los templos de Abu Simbel.

                   En el 1.248  a.C. un fuerte sismo afecta al gran templo de Abu Simbel, desplomando la mitad superior de uno de los colosos de la fachada y parte de uno de los pilares interiores.

 A finales de los años 60 y por mediación de la UNESCO, los templos fueron cortados en bloques, trasladados y reconstruidos 210 m. más lejos y 65 m. más alto, para salvarlos de las aguas debido a la construcción de la Gran Presa  de ASSUAN.

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Templo de Luxor

Según avanzamos hacia las porciones originales del templo, pasamos dos colosos más que sirven como guardianes del recinto interior del templo. Detrás de éstos, pueden ver la Columnata de Amenhotep. Esta estructura se extiende 236 pies (72 metros) a lo largo del Nilo y consiste de dos hileras de siete columnas con capitel en forma de papiro abierto, cada una de aproximadamente 52 pies (16 metros) de altura. Como verán, a través del templo todos los muros interiores y las columnas han sido tallados con inscripciones: escenas del festival de Opet, la construcción del templo, enemigos derrotados entregando tributo, y grandes eventos en la vida de los faraones.

Cuando murió Amenhotep III, los muros y columnas de la Columnata aún no habían sido decorados. Normalmente, su hijo y sucesor hubiera terminado la construcción de la columnata. Pero Amenhotep IV prefirió cambiar su nombre a Akhenatón, mover la capital de Egipto 200 kilómetros al norte y prohibir el culto a los dioses antiguos. No fue sino hasta el reino de Tutankhamón que se comenzaron a hacer los grabados en estas columnas y muros. Estos fueron terminados más tarde por Horemheb, quien curiosamente, mandó a remover el nombre de Tutankhamón, presumiblemente porque el niño-rey habia sido corrompido por su asociación con la herejía atoniana.

El relieve en ambos muros de la columnata muestra las actividades del festival de Opet en detalle. Este comienza en la esquina noroeste de los muros y se extiende hasta la esquina noreste. Por diez días los dioses residían en Luxor. Los grabados explican las ceremonias que se llevaban a cabo para celebrar el rejuvenecimiento de Amón y por lo tanto, del faraón. Los rituales garantizaban que el orden se mantendría intacto durante otro año.

http://www.hartifacts.com/phoenix/tours/luxor/sp-luxor08.htm